Y de la música del Renacimiento, de nuevo, al siglo XX: Con Federico Mompou.
Frederic Mompou i Dancausse, también Federico Mompou (Barcelona, 16 de abril de 1893 - 30 de junio de 1987), fue un compositor conocido principalmente por sus composiciones para piano solo.
Mompou estudió piano en el Conservatorio del Liceu de Barcelona antes de establecerse en París para estudiar junto a Ferdinand Motte-Lacroix en 1911. Debido a su timidez, abandonó su carrera como solista para dedicarse a la composición musical. En 1914 regresó a Barcelona, huyendo de la Primera Guerra Mundial. Regresó a la capital francesa en 1921 para huir de nuevo en 1941 tras la ocupación alemana. Mostró su apoyo a Francisco Franco dando una suma de dinero al bando nacional.
Estuvo políticamente cercano a la Liga Catalana de Francesc Cambó.
El mundo musical de Mompou es un mundo con abundancia de colores, sonidos e imágenes, toda la huella de la Cataluña que rodea a Mompou. Un hombre tranquilo y observador, atendió y buscó la forma de expresar los profundos sentimientos que se ocultaban en su interior. Un individuo tímido y de voz suave, su música refleja sus pensamientos e ideas que representan el hombre que fue. Mompou nació el 16 de Abril de 1893 en Barcelona. Dio su primer recital en público en el 1908. El año 1909, en un concierto en Barcelona, tras escuchar a Fauré interpretar su Quintet op 89, Mompou decidió que quería hacerse compositor. En el 1911 compuso lo que fue a formar parte de su primera suite para piano Plany d'Impressions Íntimes. La música de Mompou deriva del alma, una vez escribió "Todo el drama de mi vida se desarrolla en lo más profundo de mí y es ahí creada".
Su música para piano está llena de sonidos de Cataluña y resonancias de recuerdos. Suele apuntarse un lejano parentesco con las sonoridades del compositor Erik Satie. Por un corto espacio de tiempo frecuentó una fábrica de campanas en Barcelona. La fábrica producía campanas que sonaban en varias octavas. Esta experiencia causó un profundo efecto en Mompou y las campanas se encuentran a menudo en su música. Él mismo dijo: "La mejor palabra es la palabra no dicha, como todos sabéis, soy un hombre de pocas palabras y un músico de pocas notas". "La música está escrita para lo inexpresable, quisiera que ella pareciera salir de la sombra para volver de nuevo en ella. Me encuentro en la obligación de encontrar nuevas formas, creo que nunca podré encerrar mi música en un mundo demasiado correcto."
Escribiendo sobre su propia música callada Mompou dijo: "Esta música no tiene aire ni luz. Es un débil latir del corazón. No se le pide llegar más allá de unos milímetros en el espacio, pero sí la misión de penetrar en las grandes profundidades de nuestra alma y regiones mas secretas de nuestro espíritu. Esta música es callada porque su audición es interna. Contención y reserva. Su emoción es secreta y solamente toma forma sonora en sus resonancias bajo la gran bóveda fría de nuestra soledad. Deseo que en mi música callada, este niño recién nacido, nos aproxime a un nuevo calor de vida y a la expresión del corazón humano, siempre la misma y siempre renovando."
Recibió numerosos premios: Chevalier des Arts et Lettres del Ministerio Francés de Cultura, Miembro de la Real Academia del Arte Sant Jordi, Premio Nacional de la Música y el Doctorado Honoris Causa por la Universidad de Barcelona. Conoció a la pianista catalana Carmen Bravo siendo jurado en una competición de piano en Barcelona, y fue arrollado por la pasión de su interpretación del concierto de Schumann. Se casaron el año 1957. Mompou murió en Barcelona el 30 de Junio de 1987.
3 comentarios:
Solo conocía de Mompou algunas canciones. Me ha encantado esta música callada, impresionista, sencilla, pero bien meditada, en pequeñas formas - vamos, que sí que me gusta, sí :)
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